“El defensa hizo lo suficiente para distraerle”.
Cada vez que un jugador de la Premier League ha tocado el balón desde 2005, Opta ha recogido esta información. Opta registra cada toque de balón de todas las competiciones importantes del mundo.
Desde el inicio de la temporada 2017/18, esto ha evolucionado. Lanzamientos de primer toque, claridad del lanzamiento y presión en el lanzamiento ya son calificadores dentro de la base de datos de Opta.
Desarrollada por los centros de recolección de datos personalizados de todo el mundo, esta nueva característica, con gran acogida, profundiza aún más en los datos que sustentan algunos de los análisis más avanzados en el fútbol.
Si dejamos a un lado los lanzamientos de primer toque, resulta obvio que existe una cierta subjetividad en estos calificadores adicionales, por lo que este breve post ayudará quizás a… precisar un poco más.
Claridad del lanzamiento
La claridad del lanzamiento viene determinada por la cantidad de jugadores (tanto del equipo contrario como del propio) que obstruyen el camino del balón hacia la meta. El calificador tiene tres niveles y se recoge para cada intento, dependiendo de la cantidad de jugadores (sin contar al portero) que bloquean el camino del balón hacia la portería.
La claridad del lanzamiento se ve afectada por jugadores de los dos equipos, por lo que cualquier jugador que se encuentre en esta zona sin contar al portero podría afectar el nivel de claridad del lanzamiento asignado al intento.
El siguiente ejemplo es de un lanzamiento de nivel 3.
Presión en el lanzamiento
La presión en el lanzamiento se juzga por la cantidad de presión a la que está sometido un jugador cuando lanzan un disparo. También se juzga por la velocidad y el esfuerzo de un jugador cuando bloquea a quien lanza el balón y por su distancia a este. La presión puede aplicarse desde todos los ángulos.
Del mismo modo que ocurre con la claridad del lanzamiento, esta se divide en tres niveles, dependiendo de la presión. Los niveles se deciden según la cantidad de presión a la que se somete al tirador y la distancia que lo separa de los defensas.
La tecnología de recolección de datos permite añadir un ‘círculo de presión’ para cuantificar la distancia entre los contrarios y el balón.
¿Y ahora qué?
Esta capa adicional de datos pormenorizados ayudará a establecer unos análisis más profundos en fútbol. Los modelos de goles esperados son un ejemplo perfecto de cómo pueden impactar de inmediato estos calificadores. Una crítica frecuente de muchos modelos de goles esperados es que no tienen en cuenta el posicionamiento defensivo. Debido a ello, casi siempre se necesita un análisis excesivamente detallado para comprender el rendimiento superior o inferior de las tasas de goles esperados.
Estos calificadores pueden arrojar algo de luz sobre los factores importantes de la calidad del azar que anteriormente solo podían incorporarse en representación. El análisis del estilo y la fuerza de ataque y de defensa de un equipo podrá apoyarse en unos cálculos de goles esperados más fiables, así como en unos totales simples de cifras de presión que proporcionan información vital sobre la compactación defensiva. Los modelos que analizan el pase final también podrían beneficiarse de la información sobre el posicionamiento defensivo. Mediante la información del lanzamiento es posible que podamos identificar a jugadores que lanzan pases que resultan en posibilidades de gol más claras de forma sistemática que otros pases en contextos parecidos de otros jugadores. Seguro que irán apareciendo más aplicaciones, pero el hecho de tener un contexto defensivo para los lanzamientos añadirá un impulso inmediato a la investigación y los modelos existentes, puesto que aborda un punto ciego esencial.
Próximamente compartiremos más información sobre el modo en el que se añadirán estos calificadores a nuestros productos.